La torsión testicular es una emergencia urológica que resulta del retorcimiento del cordón espermático, lo que compromete el flujo sanguíneo al testículo, llevando a la isquemia y posiblemente a un daño testicular irreversible. El diagnóstico inmediato y la intervención quirúrgica son fundamentales para preservar la función testicular. Aunque la prevalencia exacta en España sigue siendo incierta debido a los diversos resultados de los estudios, la evidencia sugiere una mayor incidencia entre los hombres menores de 25 años, particularmente aquellos de 12 a 18 años, con una incidencia anual estimada de 1 en 4,000 en este grupo demográfico.1
La torsión testicular se presenta de forma aguda, con un dolor escrotal repentino y severo a menudo descrito como insoportable, y puede despertar a los pacientes del sueño. Los síntomas clave incluyen hinchazón escrotal debido al flujo sanguíneo deteriorado, dolor abdominal, náuseas y vómitos. El testículo afectado puede estar posicionado más alto de lo normal o en un ángulo inusual, y ocasionalmente puede ocurrir fiebre. La evaluación médica inmediata es fundamental para prevenir daños irreversibles, ya que generalmente se requiere cirugía de emergencia para salvar el testículo.2
Dolor Escrotal Repentino y Severo
Dolor intenso que puede despertar a los pacientes del sueño
Hinchazón Escrotal
Hinchazón debido al flujo sanguíneo deteriorado
Dolor Abdominal, Náuseas, Vómitos
Síntomas comunes que acompañan al dolor severo
Testículo en Posición Alta
El testículo afectado puede estar posicionado más alto o en un ángulo inusual
Fiebre
Ocasionalmente ocurre en casos severos
Al evaluar el dolor escrotal agudo, es crucial diferenciar la torsión testicular de otras condiciones. La epididimitis a menudo es causada por una infección bacteriana y se presenta con dolor escrotal, hinchazón y sensibilidad. El ultrasonido con Doppler de color puede ayudar a diferenciarlo de la torsión testicular. La orquitis, que puede ser el resultado de infecciones virales o bacterianas, se presenta con dolor testicular, hinchazón y fiebre. La torsión del cordón espermático implica el retorcimiento de todo el cordón y se presenta de manera similar a la torsión testicular pero es menos común. La torsión del apéndice testicular, un remanente embrionario, también puede imitar la torsión testicular y requiere una cuidadosa diferenciación.3-5
Epididimitis
Infección bacteriana que causa dolor escrotal, hinchazón y sensibilidad
Orquitis
Infección/inflamación del testículo, a menudo viral o bacteriana
Torsión del Cordón Espermático
Retorcimiento de todo el cordón, menos común que la torsión testicular
Torsión del Apéndice Testicular
Retorcimiento de un remanente embrionario que causa dolor escrotal agudo
Dada la naturaleza sensible al tiempo de la torsión testicular, el diagnóstico y la intervención rápidos son críticos. El daño testicular permanente puede ocurrir dentro de las 4-8 horas desde el inicio de la torsión. 3 Por lo tanto, distinguirlo de otras condiciones es vital para prevenir daños irreversibles.
El diagnóstico preciso y oportuno de la torsión testicular implica un examen físico exhaustivo y la realización de imágenes. Los hallazgos físicos típicamente incluyen un testículo en posición alta y un reflejo cremastérico ausente. La ecografía Doppler escrotal es la modalidad de imagen preferida para evaluar el flujo sanguíneo a los testículos. Sin embargo, la exploración quirúrgica inmediata no debe retrasarse si los hallazgos del examen físico sugieren fuertemente la torsión. En casos donde los resultados del ultrasonido Doppler son inconclusos, la exploración con radionúclidos puede ser útil, y las resonancias magnéticas o las tomografías computarizadas pueden proporcionar información adicional en casos complejos.3 Una buena comprensión de la anatomía testicular y escrotal y una evaluación clínica rápida y la realización de imágenes apropiadas aseguran el manejo oportuno de la torsión testicular. Recuerde que existe una ventana crítica de cuatro a ocho horas antes de que ocurra el daño isquémico permanente.3
La intervención quirúrgica inmediata es esencial para la torsión testicular para prevenir el daño irreversible. Los pasos clave en el manejo incluyen el reconocimiento rápido de los síntomas, como el dolor escrotal unilateral severo, las náuseas y los vómitos, y la exploración quirúrgica inmediata. Bajo anestesia general, se realiza una pequeña incisión en el escroto, y se desenrosca el cordón espermático para restaurar el flujo sanguíneo al testículo afectado. Aunque se puede intentar la destorsión manual, la cirugía sigue siendo necesaria para prevenir la recurrencia. El marco de tiempo óptimo para la destorsión es dentro de las seis horas desde el inicio de los síntomas; el tratamiento retrasado aumenta el riesgo de pérdida testicular y disminución de la fertilidad.3 Dado que exige atención quirúrgica urgente para salvar el testículo afectado y prevenir complicaciones a largo plazo. Los médicos deben mantener un alto índice de sospecha y priorizar la intervención inmediata para preservar la función del órgano.3
Sin un tratamiento rápido, la torsión testicular puede llevar a complicaciones graves, incluyendo la pérdida testicular debido a la necrosis por isquemia prolongada, infección, dolor crónico e infertilidad debido a la reducción del conteo de espermatozoides.7,8 El reconocimiento temprano y la intervención quirúrgica urgente son críticos para prevenir la pérdida testicular y minimizar las complicaciones asociadas con la torsión testicular. Los pacientes deben buscar ayuda médica inmediata si experimentan dolor escrotal severo repentino u otros síntomas relacionados.8
La torsión testicular afecta predominantemente a individuos menores de 25 años, con la mayor incidencia entre las edades de 12 y 18. Los síntomas incluyen dolor escrotal repentino y severo, hinchazón, dolor abdominal, náuseas, vómitos, posición anormal del testículo, micción frecuente y fiebre. La evaluación médica rápida es crucial para prevenir el daño irreversible; la cirugía de emergencia es el tratamiento estándar. Al evaluar el dolor escrotal agudo, es importante considerar otras condiciones que pueden imitar la torsión testicular. Distinguir la torsión testicular de otras condiciones es vital debido a su naturaleza sensible al tiempo. El diagnóstico implica el examen físico, el ultrasonido Doppler escrotal y, a veces, otras modalidades de imagen.
Referencias:
DOC.5009.122024